Capa de ozono

Definición

La capa de ozono es el recubrimiento invisible que cubre y protege a la Tierra de la radiación ultravioleta de alta frecuencia proveniente del espacio exterior, principalmente del Sol. La misma cubre como un manto a la Tierra a una altura que va desde aproximadamente los quince kilómetros de altitud, hasta los cincuenta kilómetros de altitud en una zona conocida como la estratosfera.

Etimología

La palabra capa es de origen latino, idioma en el cual se utilizaba el término «cappa» para referirse a una prenda que se utilizaba como cobertor y protector de la cabeza (que en latín es «caput»). Por su parte, ozono es de origen griego, del término «ozon», que significa olor. En el caso de la capa de ozono se debe entender en el sentido de substancia sutil. Por tanto, se trata de una substancia volátil que cubre y protege.

colladito DefiniciónSustantivo masculino. Este termino es de uso obsoleto, hace referencia como parte diminutivo de coll...
corruptela DefiniciónSustantivo masculino. Este vocablo se refiere la acción y resultado de corromper o corromperse, el a...

Fue descubierta a comienzos del siglo XX (más específicamente en el año de 1913) por los físicos Charles Fabry, y Henri Bouisson (ambos de nacionalidad francesa).

En la misma se encuentra presenta hasta un 90% del ozono (un compuesto conformado por tres átomos de ozono) presente en la atmósfera, misma razón por la cual es de vital importancia para la protección de los rayos ultravioleta y razón por la que se promueve la conservación del medio ambiente, para que no surja una contaminación excesiva que pueda resultar en un detrimento grande que pueda afectarla. Para esto se reunió en 1987 la Asamblea General de la ONU, generando el denominado Protocolo de Montreal, en el que se especifican lineamientos para coadyuvar a su protección.

La dicción «ozono» proviene del griego «ózon» (ὄζων), que significa «olor» o «que huele». La palabra está compuesta por dos elementos:

El sufijo -ón, que se utiliza para formar sustantivos a partir de adjetivos y verbos. En este caso, se utiliza para convertir el verbo griego «ozein» (ὄζειν), que significa «oler», en un sustantivo.

La raíz griega ozo- (ὀζ-), que proviene de la misma raíz que el verbo «ozein» (ὄζειν) y significa «olor«.

El ozono es un gas compuesto por tres átomos de oxígeno (O3), que se encuentra en la atmósfera terrestre y es responsable de la absorción de la radiación ultravioleta del sol. El ozono se forma por la acción de la energía solar sobre el oxígeno diatómico (O2) presente en la atmósfera.

La palabra «ozono» fue acuñada en 1840 por el químico alemán Christian Friedrich Schönbein, quien descubrió la sustancia y le dio el nombre basado en su olor distintivo. El término «ozono» se ha utilizado desde entonces para referirse a esta sustancia química en todas las lenguas modernas, incluyendo el español.

Con todo, es claro que las políticas de los gobiernos no han logrado frenar la actividad industrial y muchas otras derivadas que atentan en forma directa contra la capa de ozono, y ya hay zonas en que ésta es muy débil o, inclusive, contiene agujeros de gran extensión como el de la antártica, que es tres veces de las dimensiones del continente australiano.

El origen de la capa de ozono

El origen de la capa de ozono se encuentra en la combinación de factores naturales y antropogénicos. Se trata de una fina película de gas que se encuentra en la estratósfera y protege la Tierra de los rayos ultravioleta (UV) del sol.

Desde tiempos antiguos, el ozono ha sido producido naturalmente por los rayos cósmicos y la radiación solar. Sin embargo, en el siglo XX, la actividad humana comenzó a tener un impacto negativo en ésta. La emisión de gases como el cloro y el bromo, que se encuentran en los productos químicos como los refrigerantes y los spray para el cabello, ha contribuido significativamente a su degradación.

En 1985, se descubrió un “agujero” en la capa de ozono sobre la Antártida, lo que causó preocupación a nivel mundial. Estudios posteriormente demostraron que este agujero se debía a la acción de los gases de efecto invernadero, en particular el cloro y el bromo, que reaccionan con el ozono y lo destruyen.

Ante esta crisis ambiental, la comunidad internacional tomó medidas para proteger la capa de ozono. En 1987, se adoptó el Protocolo de Montreal, un acuerdo internacional que limita la producción y el uso de los gases nocivos. Gracias a estas medidas, se ha logrado una reducción significativa en la emisión de estos gases y se ha visto una recuperación gradual de la capa en los últimos años.

Empero, aún queda mucho por hacer para protegerla. Los especialistas señalan que se debe seguir reduciendo la emisión de gases y fomentar la investigación y el desarrollo de alternativas más sostenibles. Además, es crucial sensibilizar a la población sobre la importancia de la capa de ozono y cómo nuestras acciones individuales pueden tener un impacto significativo en su conservación.

Aparte de limitar la producción y uso de los gases que dañan la capa de ozono, también es importante seguir investigando y mejorando nuestro conocimiento sobre la misma y su dinámica. Los científicos están trabajando en la comprensión de los procesos que ocurren en la estratósfera y cómo la capa de ozono se ve afectada por los factores naturales y antropogénicos.

Otra área importante de investigación es el monitoreo ésta. Los satélites y los instrumentos en la tierra nos permiten medir la concentración de ozono en la estratósfera y monitorear los cambios a lo largo del tiempo. Esta información es crucial para evaluar la efectividad de las medidas para protegerla y para tomar decisiones informadas sobre cómo preservarla en el futuro.

Otro punto es sensibilizar a la población sobre cómo nuestras acciones individuales pueden tener un impacto significativo. Por ejemplo, podemos reducir nuestra huella de carbono y usar alternativas más sostenibles a los productos químicos. También podemos apoyar políticas e iniciativas que protejan la capa de ozono y fomenten un futuro más sostenible para nuestro planeta.

Los problemas más graves de la capa de ozono

Estamos hablando de una parte vital de nuestra atmósfera, que juega un papel crucial en protegiendo a la vida en la Tierra de la radiación UV nociva del sol. Sin embargo, en las últimas décadas, ha enfrentado una serie de desafíos y problemas que ponen en peligro su integridad y, por lo tanto, nuestra propia salud y bienestar. Aquí describiremos los principales problemas de la capa de ozono y su impacto en nuestro planeta:

Agujeros en la capa de ozono: El problema más preocupante es el surgimiento de agujeros en la capa, mismos que se forman en las regiones polares, donde la baja temperatura permite a los compuestos químicos dañinos, como los clorofluorocarbonos (CFC), alcanzar la estratósfera y reaccionar con el ozono. Como resultado, la concentración de éste en estas áreas disminuye drásticamente, lo que permite que la radiación UV pase a través de la atmósfera y aumente el riesgo de daños a los organismos vivos, incluyendo a los seres humanos.

Emisiones de gases dañinos: Los gases dañinos para la capa de ozono, como los CFC, son liberados en la atmósfera por una serie de actividades humanas, incluyendo la producción y uso de refrigerantes, productos químicos y plásticos. Estos gases tienen una vida útil larga en la atmósfera y pueden viajar miles de kilómetros antes de reaccionar con el ozono y dañarlo.

Cambio climático: Además de la liberación de gases dañinos, el cambio climático también está afectando la capa de ozono. El aumento de la temperatura en la estratósfera puede alterar la dinámica de la capa y hacer que sea más vulnerable a los daños causados por los gases.

Efectos secundarios no previstos: A medida que las medidas para proteger la capa de ozono se implementan y los gases dañinos son reemplazados por alternativas más seguras, también surgen preocupaciones sobre los efectos secundarios no previstos de estos sustitutos. Por ejemplo, algunos productos químicos utilizados como sustitutos pueden ser tóxicos para la vida acuática y pueden tener un impacto negativo en los ecosistemas acuáticos y terrestres.

Monitoreo insuficiente: A pesar de los esfuerzos por proteger la capa de ozono, la monitorización y la evaluación continúan siendo insuficientes. Esto significa que es posible que no tengamos una comprensión completa de la magnitud del problema y de los efectos a largo plazo de los gases dañinos.

Productos más dañinos para la capa de ozono

Los productos químicos más perjudiciales son aquellos que contienen cloro y bromo, que son altamente reactivos y pueden reaccionar con los átomos de ozono y destruir la capa. Estos productos incluyen:

Compuestos clorofluorocarbonos (CFC): los CFC son gases utilizados en refrigerantes, aerosoles y otros productos, y son conocidos como los peores agresores de la capa de ozono.

Halones: los halones son gases utilizados como extintores de incendios.

Hidroclorofluorocarbonos (HCFC): los HCFC son gases usados como sustitutos de los CFC.

Metilterbutiléter (MTBE): el MTBE es un aditivo común en la gasolina.

Estos productos químicos son muy dañinos para la capa de ozono porque pueden viajar a la estratósfera y destruir el ozono, lo que permite que los rayos ultravioleta dañinos del sol lleguen a la Tierra. Esto puede aumentar el riesgo de cáncer de piel, cataratas y otros problemas de salud relacionados con la exposición a la luz UV.

Por lo tanto, se requiere controlar y reducir la producción y liberación de estos productos químicos para la capa de ozono y buscar alternativas más seguras. La Convención de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y la Capa de Ozono ha establecido un programa global para disminuir y eventualmente, eliminar estas sustancias.

Si se atrofiara por completo la capa, tendríamos graves consecuencias para nuestro planeta y para la vida en la Tierra. Aquí hay algunos de los efectos más importantes de la pérdida total de la capa de ozono:

Aumento de la radiación UV: sin la protección de la capa de ozono, los rayos ultravioleta dañinos del sol llegarían a la Tierra sin obstáculos. Esto aumentaría el riesgo de cáncer de piel, cataratas y otros problemas de salud relacionados con la exposición a la luz UV.

Cambios en los ecosistemas: la radiación UV aumentada también afectaría los ecosistemas acuáticos y terrestres. Por ejemplo, podría afectar la producción de alimentos y la biodiversidad.

Daño a la vida marina: los rayos UV aumentados también podrían afectar la vida marina, incluyendo las plantas y los animales que viven en el océano.

Efectos sobre los climas: la capa de ozono también juega un papel importante en el equilibrio climático de la Tierra. Si se atrofiara por completo, podría tener un efecto sobre los patrones climáticos y causar un cambio climático acelerado.

La radiación UV también puede afectar el sistema inmunológico y el sistema nervioso central, lo que podría tener efectos a largo plazo en la salud humana.

Se debe mencionar que la capa de ozono es esencial para la protección de los cultivos y la producción de alimentos. La radiación UV aumentada podría afectar la producción de alimentos y disminuir la disponibilidad de alimentos, especialmente en las regiones más cercanas a los polos.

Otro efecto importante de la pérdida total de la capa de ozono es la alteración de los patrones climáticos. Podría tener un efecto que desencadene un cambio climático acelerado.

Por último, la pérdida total de la capa de ozono tendría graves consecuencias para la biodiversidad. La radiación UV aumentada podría afectar la vida marina y terrestre, incluyendo las plantas y los animales, y disminuir la biodiversidad.

La capa de ozono de la Tierra y la de otros planetas

Aunque la capa de ozono es una característica importante de la Tierra, no todos los planetas tienen una capa de ozono similar. La capa de ozono en otros planetas del sistema solar es muy diferente de la capa de ozono de la Tierra.

Mercurio, el planeta más cercano al sol, no tiene una capa de ozono significativa. La atmósfera de Mercurio es muy tenue, y la radiación UV es muy intensa debido a la cercanía del planeta al sol. Como resultado, no hay una protección efectiva contra la radiación UV en Mercurio.

Marte, por otro lado, tiene una atmósfera mucho más densa que Mercurio, pero todavía no tiene una capa de ozono significativa. La atmósfera marciana contiene principalmente dióxido de carbono, lo que significa que la protección contra la radiación UV es limitada.

Júpiter y Saturno son gas giants, lo que significa que tienen atmósferas compuestas principalmente de hidrógeno y helio. Estos planetas no tienen una capa de ozono, pero su atmósfera densa es una protección contra la radiación UV.

Urano y Neptuno tienen atmósferas similares a Júpiter y Saturno, y también no tienen una capa de ozono. Aun así, se cree que estos planetas tienen una capa de ozono en la estratósfera, pero esta capa es muy diferente de la de la Tierra.

Usos y aplicaciones de capa de ozono

Su función principal es la se servir de protección de los rayos ultravioleta de frecuencia corta, previniendo problemas como el cáncer por radiación, la lluvia ácida o el calentamiento global.

Bibliografía ► Definiciona.com (5 marzo, 2023). Definición y etimología de capa de ozono. Recuperado de https://definiciona.com/capa-de-ozono/