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Definición
Sustantivo masculino. Esta palabra hace referencia a una condición, estado o disposición en la que se encuentra un cuerpo, cuando las fuerzas encontradas que actúan en éste se pueden anular y posteriormente, compensar, destruyéndose de manera mutua. Situación de un cuerpo que cuenta con poca base de basamiento, soporte y sujeción, sin poder caer en ella. Peso que es homogéneo al otro y se puede contrarrestar.
Etimología
Este término en su etimología es de procedencia latina, bajo denominación ‘aequilibrium’, con la misma acepción.
Lo compone el vocablo ‘aequus’, que significa ‘igualdad’ y ‘libra’, que hace alusión a la balanza-.
Cuando se dice que algo o alguien se halla en equilibrio perfecto, es porque se encuentra en pie y no cae a pesar de no tener una base que le sirva de sostén. Un ejemplo es cuando una persona se mantiene fija en su postura, bien sea en un sentido físico o psicológico.
Se trata de una clase de estabilidad que se identifica si existe un estado armónico y concordante entre cosas distintas o sencillamente, entre los elementos que constituyen un todo. Tal es el caso de características a fines como la compostura, la sensatez, la mesura, que forman parte de los rasgos de la salud mental de alguien.
Las condiciones de equilibrio pueden ser diferentes, al igual que el empleo de la palabra en distintas ramas de la ciencia, así como para denotar a un conjunto de actividades que sobresalen por su grado de prudencia, en medio de unas circunstancias complejas y difíciles. La idea es encontrar el punto de equilibrio, el cual se logra por varios métodos y puede variar según sea el caso.
De igual modo, este término se aplica para el ámbito del deporte, como en las competencias con la barra de equilibrio, un elemento clave dentro de la gimnasia artística.
En numerosos ámbitos, la palabra ‘equilibrio’ es utilizada. Uno de los más escuchados en la política, cuando se habla del equilibrio del poder, concepto que determina el estado de las relaciones internacionales entre las naciones, previendo que ningún país ostente más poder que los demás.
Desde una perspectiva metafórica, el equilibrio denota a la armonía que existe entre las cosas y los seres, sinónimo de raciocinio, pertinencia y ecuanimidad en los juicios y las acciones. El individuo que ha alcanzado el equilibrio para actuar en la vida, es capaz de moverse por distintos caminos sin llegar a caer, lo cual significa sin perder el autodominio y cometer errores que lo afecten.