Tabla de contenido
Definición
El término «albardillador» es un sustantivo masculino de uso obsoleto, especialmente en el contexto de la cinegética. Se refiere a una persona encargada de colocar una caperuza de cuero sobre las aves de rapiña utilizadas en la cetrería, con el fin de mantenerlas quietas y controladas durante el proceso de entrenamiento o durante la caza.
Etimología
La palabra «albardillador» se forma a partir del sustantivo «albardilla», que hace referencia a la caperuza de cuero mencionada anteriormente, y del sufijo «-dor», que indica la acción de realizar una tarea o función específica. En este caso, el término se refiere a la persona que lleva a cabo la acción de colocar la caperuza sobre las aves de rapiña.
El sustantivo «albardilla», a su vez, tiene su origen en el término «albarda», que se refiere a la silla utilizada para domar a las caballerías. El sufijo «-dor» proviene del latín «-tor», que indica agente, es decir, la persona que realiza la acción.
Características del albardillador
El albardillador era una figura importante en la práctica de la cetrería, ya que su habilidad para colocar correctamente las caperuzas sobre las aves de rapiña influía en el éxito de la caza. Se requería destreza manual y conocimiento de las técnicas adecuadas para garantizar la comodidad y seguridad del ave durante su uso.
Función del albardillador
La principal función del albardillador era preparar y equipar a las aves de rapiña con las caperuzas necesarias para controlar su visión y mantenerlas tranquilas durante la caza. Esta tarea era crucial para garantizar el éxito de la cetrería y la seguridad tanto del ave como del cazador.
Tipos de caperuzas utilizadas por el albardillador
Caperuza de entrenamiento:
El albardillador colocaba una caperuza especial durante el proceso de entrenamiento del ave de rapiña, diseñada para acostumbrarla gradualmente a la restricción visual y al uso de la caperuza durante la caza.
Caperuza de caza:
Para la caza propiamente dicha, el albardillador seleccionaba una caperuza adecuada según las características del ave y el tipo de presa que se buscaba. Estas caperuzas debían ser cómodas y seguras para el ave, permitiéndole mantener la concentración en la presa sin causarle molestias.
Importancia histórica del albardillador
En la época en que la cetrería era una práctica común, el albardillador desempeñaba un papel crucial en la preparación y entrenamiento de las aves de rapiña utilizadas en la caza. Su habilidad y experiencia contribuían al éxito de la cetrería y al mantenimiento de esta tradición ancestral.
Ejemplo de uso del término
En la literatura medieval, se encuentran referencias al albardillador como parte del séquito de un cazador noble, encargado de preparar las aves de rapiña para la caza de aves de menor tamaño o mamíferos en los bosques y campos de caza.
Conclusiones
En conclusión, el término «albardillador» representa una figura histórica importante en el contexto de la cetrería y la caza con aves de rapiña. Esta persona, cuyo oficio se ha vuelto obsoleto con el paso del tiempo, tenía la responsabilidad de colocar caperuzas de cuero sobre las aves de presa utilizadas en la cetrería, tanto durante el entrenamiento como durante la caza. Su labor era fundamental para garantizar el control y la seguridad de las aves, así como el éxito de las expediciones de caza.
La etimología de «albardillador» revela su origen en el término «albardilla» y el sufijo «-dor», indicando la acción de colocar la caperuza sobre las aves. Esta práctica tenía una importancia significativa en épocas pasadas, cuando la caza con aves de rapiña era una actividad común entre la nobleza y la aristocracia.
Aunque el oficio del albardillador ha caído en desuso con el tiempo, su papel histórico no debe pasarse por alto. Su destreza y conocimientos contribuyeron al desarrollo y la práctica de la cetrería, una actividad que ha dejado una marca indeleble en la historia de la caza y la relación entre el hombre y el mundo natural.