El atletismo como tal, en la modernidad, se estima como un deporte de competición a nivel individual y grupal, que abarca diversas pruebas en las que los participantes deben esforzarse al máximo y demostrar sus distintas destrezas físicas y estratégicas que han conseguido con sus exhaustivos entrenamientos. Tales competiciones o tests, se pueden llevar a cabo en pistas a campo abierto o cubiertas, mismas que deben contar con las medidas y detalles técnicos especificados por las autoridades deportivas.

La idea principal de la disciplina del atletismo, es combatir contra el espacio y el tiempo. Se practica en todas las naciones del planeta y consiste en variadas pruebas significativas, en las que los más avezados atletas son homenajeados y premiados.

Como tal, el atletismo no es un deporte tan apetecido ni practicado a escala global, sobre todo porque exige gran compromiso, esfuerzo y dedicación, aunque casi no se requieren tantas cosas para su práctica, más allá de su propio peso y dominio corporal.

Los juegos olímpicos

Para los antiguos griegos, la exigencia física y el entrenamiento del cuerpo, como de la mente, para llegar a la perfección, era fundamental y se demostraba en los Juegos Olímpicos, en honor a las deidades. El primero de estos eventos se llevó a cabo en el 776 a.C. Valientes hombres se enfrentaban en combates cuerpo a cuerpo. Otros, luchaban por lanzar la jabalina más lejos, así como en competencias de salto largo y carreras.