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Definición
Es un adjetivo que tiene como definición el que debe o puede ser agasajado o tener un trato con atención de manera elocuente, cariñoso, cordial y cortés. Se dice de una persona que está alagada, que ha recibido regalos o con muestras de afecto, aprecio, inclinación, estimación y de simpatía.
Etimología
La palabra «agasajable» proviene del verbo transitivo «agasajar» y del sufijo «ble» que indica susceptible o puede ser. El verbo «agasajar» tiene su origen en el árabe «ghazala», que significa «entretener con diversiones y fiestas», reflejando así la idea de tratar con atención especial y cortesía a alguien. Este verbo se integró al castellano durante la dominación árabe en la península ibérica. El sufijo «-ble» deriva del latín «-bilis», que denota capacidad o posibilidad de realizar una acción, en este caso, la capacidad de ser agasajado.
Significado Amplio
1. Persona o cosa que puede ser agasajada
El término «agasajable» se refiere a la capacidad inherente de una persona o cosa para ser objeto de agasajos, atenciones, muestras de afecto o cortesías. Esta característica implica una disposición receptiva hacia las demostraciones de aprecio y cariño por parte de otros individuos o entidades.
2. Actitud receptiva ante muestras de afecto
Además de describir la capacidad de ser agasajado, «agasajable» también denota una actitud receptiva y complaciente hacia las expresiones de afecto, tales como regalos, muestras de simpatía y gestos amables. Esta disposición implica una apertura emocional y una predisposición a recibir con gratitud las muestras de cariño de los demás.
Características
1. Sensibilidad emocional: Las personas consideradas «agasajables» suelen poseer una sensibilidad emocional que les permite apreciar y valorar las muestras de afecto y cortesía.
2. Agradecimiento: Quienes son agasajables tienden a expresar gratitud y reconocimiento hacia aquellos que los tratan con amabilidad y afecto, generando así relaciones interpersonales positivas.
Clasificación
En cuanto a la clasificación, «agasajable» puede aplicarse a una amplia gama de contextos y situaciones, desde relaciones personales hasta entornos profesionales y sociales. Esta versatilidad en su aplicación refleja la importancia de la cortesía, el respeto y la reciprocidad en las interacciones humanas.
Ejemplos
Un ejemplo claro de alguien agasajable es aquella persona que, al recibir un regalo inesperado, muestra una expresión de alegría y agradecimiento sincero, reconociendo el gesto amable del obsequiante.
Otro ejemplo podría ser una entidad o institución que, al ser honrada con un reconocimiento público, demuestra una actitud receptiva y humilde, valorando el gesto de aprecio y consideración por parte de la comunidad.
Origen y Evolución
Origen Histórico: La noción de agasajar tiene raíces profundas en diversas culturas y períodos históricos. Desde las antiguas civilizaciones hasta la sociedad contemporánea, el acto de agasajar ha sido una forma de expresar respeto, cortesía y aprecio hacia otros individuos.
Evolución Lingüística: A lo largo del tiempo, el término «agasajable» ha evolucionado en su significado y aplicación. En las sociedades modernas, la importancia de las relaciones interpersonales y la cortesía ha contribuido a la persistencia de este concepto en el lenguaje cotidiano.
En conclusión
La palabra «agasajable» encierra en su significado una profunda dimensión humana relacionada con la capacidad de recibir y apreciar muestras de afecto, cortesía y atención por parte de otros. Su origen etimológico nos remonta a épocas antiguas, donde el acto de agasajar era una práctica común en diversas culturas.
Las características de las personas agasajables, como su sensibilidad emocional y su disposición al agradecimiento, resaltan la importancia de la reciprocidad y el respeto en las relaciones humanas. Además, su clasificación como un concepto versátil evidencia su aplicabilidad en distintos contextos sociales, profesionales y personales.
Los ejemplos de agasajabilidad nos muestran cómo esta cualidad se manifiesta en la vida cotidiana, desde gestos simples de amabilidad hasta reconocimientos públicos y honores institucionales.
En resumen, «agasajable» no solo describe una cualidad individual, sino que también representa un valor fundamental en la convivencia humana, basado en la gratitud, el afecto y la consideración mutua.