Definición
Sustantivo masculino y femenino. Esta palabra (en historia eclesiástica) se refiere a un hereje que defendía los mismos errores que los begardos basados en la impecabilidad del alma humana cuando llega la visión directo a Dios y en doctrinas análogas parecida a los gnósticos.
Etimología
término en su etimología viene de «bergardo», procede del francés «begard» y a su vez del neerlandés «beggaert».