Adjetivo. Esta palabra es una expresión antigua, se decía especialmente de una persona desdichado, infortunado, fracasado, mísero, desvalido, infeliz, desventurado, desamparado, infausto, lamentable, menguado, calamitoso, insulso o desabrido, que halla tenido alguna desgracia, infortunio, calamidad o adversidad que impide progresar o seguir adelante.
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Etimología
érmino etimológicamente viene del prefijo «in» negación y del sustantivo o adjetivo «beato» que quiere decir algo dichoso, feliz y bienaventurado, por lo tanto quiere decir que no esta feliz.