Adjetivo. Esta expresión en la actualidad se encuentra desusada hace alusión como participio activo de lamentar, que quiere decir el que el que lamenta, implora, plañe, arrepiente, queja, desuela, suplica, duele, aflige, deplora, gime, entristece, gime, llora, apena, que merece ser lamentado o deplorado.
Etimología
io etimológicamente viene del antiguo participio del verbo activo transitivo «lamentar» y del sufijo «nte» que indica que hace la acción, también como agente.