Adjetivo. Este termino se refiere especialmente a una capellanía o aplicado también a una dignidad, cargo o desempeño de tipo civil, eclesiástico o político, que es amovible, divisible, disociable, rompible, removible, disgregable o separable a quien la otorga, confiere o recibe de ella, se aplica también al beneficio eclesiástico del mismo capellán.
Etimología
cablo en su etimología proviene del latín «nutus» que quiere decir voluntad y del sufijo «al» que indica relativo, concerniente o perteneciente.