Verbo activo transitivo. Este vocabulario es de uso bastante infrecuente, inclusive obsoleto, hace referencia en dejar o abandonar en estado de humillación, afrenta, agravio, ultraje, menosprecio, desprecio, vergüenza, ofensa o la causa que puede lastimar la dignidad y la honra de la persona.
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Etimología
Esta palabra etimológicamente viene del prefijo «des» privativo y del verbo activo transitivo «humillar» o del latín «humiliāre»