Sustantivo masculino. Este vocabulario es usado en El Salvador, Guatemala, Honduras y México, se refiere a un animal fabuloso o simbólico que representa el espíritu protector, tutelar o guardián de una persona. (En Guatemala, Honduras, México y Nicaragua) agorero, hechicero, brujo o nigromante que tiene la capacidad de transformar un animal, elemento, fuego o un fenómeno meteorológico.
Etimología
ablo en su etimología viene del náhuatl «nahualli» que quiere decir bruja.