Definición
Sustantivo masculino. Consiste en una sustancia, misma que se halla interpuesta en medio de dos objetos o partes, para que se peguen. Asimismo, es un objeto que se ha diseñado para que se adhiera a alguna superficie, por lo que cuenta con una zona pegajosa. Si se asume como adjetivo, entonces alude a la capacidad de pegarse.
Etimología
Esta terminología se encuentra constituida por lexemas del latín y presenta la acepción etimológica de “capaz de adherirse”. Lo compone el prefijo ‘ad’, que significa ‘hacia’, junto con el vocablo ‘haerere’ (adherir), finalizado por el sufijo ‘ivo’, que hace referencia de una relación de tipo activo o pasivo. Originalmente, se adaptó del latín ‘adhaesum’, a su vez tomado de ‘adhaerĕo’.
En el mercado se hallan diversos adhesivos, de diferentes clases. Por ejemplo, existen los adhesivos líquidos, que cumplen su función total al secarse luego de haber sido pegado a otro objeto o superficie, como en el caso de la cola blanca, la goma blanca, la silicona, etc.
Mientras que los adhesivos sólidos, por lo general se presentan en barras que ayudan a pegar papeles o cartones. Algunos de éstos también se encuentran en polvo.
Un adhesivo puede extraerse de varias fuentes, tanto de índole animal, como vegetal. La tradicional cola se produce usando pieles o huesos. Los adhesivos de naturaleza vegetal se fabrican con maíz, papa o yuca. Al igual, se pueden lograr de manera sintética, como por ejemplo a partir del petróleo.
La cinta adhesiva se emplea para unir dos cosas por un lapso de tiempo, a en ocasiones permanentemente. Su material se denomina celo, mismo que posee una capa de emulsión adhesiva en uno de sus lados, empero se comercializan cintas con adhesivo por ambos lados. Se fabrica con emulsiones acrílicas y otras con caucho no tratado. La cinta aislante se fabrica con vinilo y se usa sobre todo, para aislar cableados y partes eléctricas.