Adjetivo. Este vocabulario es de uso bastante infrecuente, inclusive obsoleto, se decía especialmente a una persona que esta aburrido, harto, inapetente, cansado, hastiado, desanimado, fastidiado o desganado o por no contar algo que puede distraer con mayor facilidad, también se dice en aborrecer o de aborrecerse o causar algún rechazo, aversión, antipatía, repulsión, animadversión, resentimiento o repugnancia hacia alguien.
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Etimología
n su etimología es de origen incierto; es conferido del adjetivo «aborrecido» participio del verbo activo transitivo «aborrecer».