Etimología

Este término proviene de la voz latina ‘separare’ y presenta el sentido etimológico de “imponer una distancia entre dos cosas o personas”. Se estructura con el prefijo ‘se’ (indicador de separación); el vocablo ‘parare’, que significa parar y finalmente, el sufijo adjetivizante ‘ado’.

Pareja separada

Es una condición  intermedia entre la unión marital y el divorcio legal. En el ámbito del Derecho, estar separado significa un estado que implica que el juzgado todavía no da por sentado el divorcio. Por consiguiente, la categoría de separado implica que el lazo conyugal continúa en vigencia, a pesar de que se asuma como terminados distintos deberes y derechos de ambos.

En algunos casos, los esposos deciden quedar separados de hecho, es decir, acuerdan que su vínculo queda disuelto, pero no involucran recursos legales, sino un mutuo acuerdo. Sea de manera oficial o consensuada, esto conlleva a definir una repartición de bienes, la patria potestad de los hijos y otros asuntos.

Casi siempre, las parejas primero deciden separarse y luego pasar por el proceso del divorcio, como lo demanda la ley, gracias a lo cual existe un lapso entre la separación y el divorcio, en el que los cónyuges terminan de definir si arreglan su relación y reconstruyen su vida marital, o definitivamente la rompen.

Popularmente, cuando se pregunta por el estado civil de alguien, muchos responden “soy separado (a)”.

“Se vende por separado”

Algunos artículos compuestos por diferentes accesorios, tienden a venderse por separado, lo cual significa que tan sólo se puede comprar el objeto esencial, pero cada una de sus herramientas, vestuario, elementos complementarios, se deben adquirir cada uno por aparte.

El derecho a no ser separado de sus padres

Se trata de un derecho internacional de todo niño, el de convivir con sus progenitores, a no ser de que exista una sentencia judicial que determine lo contrario, amparando los intereses de los menores. En casos normales, los niños cuentan con el derecho de permanecer viviendo con sus dos padres, a menos que esta condición sea perjudicial para el bienestar integral de los infantes.

La educación separada por sexos

Así se denomina un modelo educativo que consiste en separar a los estudiantes por sexos, distinto de lo que ocurre en la modalidad mixta, la más adoptada en occidente.

Al este de Europa, previo del siglo XIX, las niñas no se podían inscribir a las escuelas, sino que debían ser educadas en sus casas, por medio de profesores privados, como consecuencia de la idea colectiva de que las mujeres no podían participar de la academia.

Con la Revolución Industrial, se crearon planteles educativos femeninos, tanto para los europeos católicos, como para los protestantes. Sucedió similarmente en Norteamérica, donde por acciones revolucionarias se instauraron escuelas sólo para mujeres. Sin embargo, se calificaban como de menor calidad que las instituciones masculinas. Unas, eran dirigidas por monjas y las otras, por sacerdotes.