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Definición
Adjetivo. Este vocabulario sirve para referirse especialmente a una persona, aunque también, en extensión, a cualquier ser viviente como las plantas y los animales, que tiene vida. Esta expresión se puede usar como sustantivo. Se dice especialmente de la llama, fuego o la brasa, ardiente, carbonizado, ígneo, encendido e incandescente. Fuerte, vehemente, intenso, potente y agudo. Ingenioso, inteligente, perspicaz o agudo. Que puede durar y subsistir en toda su fuerza y vigor. Se dice de una persona muy persuasiva.
Etimología
Esta palabra en su etimología viene del latín «vīvus», con el mismo significado, aquello «con vida». Se considera que este término a su vez procedió del protoindoeuropeo *gʷih₃wós, con el significado de ‘vivir‘, de la raíz *gʷeyh₃-.No obstante, ello es sólo una forma hipotética surgida de la reconstrucción recuperada a partir de diversas variantes lingüísticas, aunque considerada con notable fuerza y evidencia.
Algo vivo, en un sentido amplio, se refiere a todo lo que reviste una forma de vida, es decir, un ser biológico, bien unicelular o pluricelular. También puede refererirse como vivo a aquello que tiene continuidad. Por ejemplo: «su legado sigue vivo», «el impresionismo sigue vivo».
Que tiene astucia, que obra de una forma ventajosa con respecto a los demás.