Faltar

Etimología

Este término se compone del sustantivo ‘falta’ y del sufijo flexivo ‘ar’, que indica infinitivo de los verbos de la primera conjugación.

En oraciones de negación en tercera persona, presenta el sentido de “dejar de haber”.

Asimismo, puede emplearse con el significado de la ausencia de alguien. Al hecho de que un individuo no asista en el sitio en el que se le esperaba. En tal efecto, la expresión se compone con la preposición ‘de’ o ‘a’. También, se entiende como no rendir lo debido, o no mostrar los resultados planteados. Es decir, como sinónimo de fracasar.

En otro sentido, se emplea para dar a entender un incumplimiento, de algún compromiso, un deber, un juramento. En este caso, la expresión se constituye con la preposición ‘a’ o ‘al’.

Aparte, señala faltar un lapso para que algo acontezca. Algo que no se ha realizado todavía, como una labor, etc. Pero en otro contexto, en el de la moral, se habla de “faltar el respeto”, que implica tratar a alguien sin las consideraciones pertinentes. Así, se usa junto con la preposición ‘en’ o ‘el’, para señalar una falta.

Otra acepción es la que hace alusión a un adulterio o infidelidad. “María le faltó a Daniel, pues mantenía una relación escondida con Carlos”.

Del mismo modo, se derivan distintas locuciones con el verbo faltar, como las siguientes:

• “Falta poco para que llegue navidad”. En este caso, con la conjugación en pasado, se le atribuye el sentido de haber estado al borde de suceder algún evento.
• “Falta por”, expresión que señala que todavía hay algo por hacer.
• “Falta por ver”, indica dudas sobre alguna situación.
• “Ni sobra ni falta”, lo cual quiere decir que está claro y completo.
• “¡Faltaba más!”, locución que se puede conjugar en distintos tiempos, para referenciar que aquello se trata de un colmo o exabrupto.
• “¡No faltaría más!”, indica un rechazo a alguna pretensión y que por ninguna razón se puede admitir. Muchas veces se dice como acto de cortesía, para mostrarse agradecido por algún buen gesto de otra persona.