Definición
Sustantivo femenino. Este vocabulario se refiere como la característica, índole o cualidad esencial o elemental de firme y que cumple con el parámetro de estable, resistente y consistente, que no se puede abatir ni dominar. Constancia, tenacidad, insistencia y perseverancia de quien no se deja dominar e influenciar.
Etimología
Esta palabra en su etimología viene del sustantivo y adjetivo ‘firme’ y del sufijo ‘eza’, que indica cualidad de.
Una de las acepciones más empleadas, es la que hace alusión de la fortaleza y permanencia que caracterizan a una persona, que suele ser constante y disciplinada en sus deberes y labores.
Aquel individuo que ha adquirido firmeza en su carácter, se distingue por la ausencia de miedo frente a las circunstancias adversas, pues para volverse fuerte tuvo que haberse enfrentado a sus temores. De modo que al demostrar firmeza, una persona no tiende a rendirse ante los obstáculos y problemas, sino que seguirá con total decisión hacia sus objetivos.
No todos los seres humanos cuentan con esta virtud, ya que pocos son quienes no vacilan, ni dudan ante la turbulencia de la vida, manteniendo con claridad la meta y ciñéndose al camino que conduce a ésta, pase lo que pase. La firmeza es una cualidad que sirve como escudo para no dejarse doblegar por otros ni por nada, ni permitir influencias de ningún tipo, que desvíen del propósito final e intenten cambiar las decisiones.
Casi siempre, el individuo que demuestra firmeza, es percibido como alguien rudo y mordaz, como una persona dura de persuadir o ablandar. Sin embargo, esto no significa que sea alguien malo o insensible.
Pero también existe la noción que se atribuye a las cosas, denotando que cuentan con propiedades de dureza y estabilidad, como los objetos sólidos y debidamente asentados. Por ejemplo una mesa se describe como firme, teniendo en cuenta que ésta no se anda moviendo, ni temblando, ni oscilando, pues sus patas y su tabla se encuentran en perfectas condiciones.
En cuanto al ámbito de la construcción y de los terrenos, representa una cualidad del suelo. De hecho, coloquialmente se emplea para hacer entender que si alguien va viajando por aire, o por mar, en su destino está la tierra firme. “Carlos llegará mañana a tierra firme”.