Definición
Sustantivo masculino. Se llama así al grupo de reacciones químicas del organismo, a través de las que un ser vivo puede transformar algunas sustancias, con el objetivo de nutrirse y obtener la energía vital que se necesita para crecer, desarrollarse, reproducirse, adaptarse y vivir sostenidamente.
Etimología
Este término es un neologismo que propuso el científico Theodor Schwann, de Alemania (1810-1882). Se compone lexicalmente del sufijo ‘-ισμός’ (ismo), que alude a una cualidad, junto con la partícula griega ‘μεταβολή’ (metabole), que significa transformación.
Por ende, el sentido etimológico de esta palabra es la cualidad que poseen las plantas, los animales y los humanos, de transformar de manera química la esencia de algunas sustancias. Tal cual lo realiza el reino vegetal, con la fotosíntesis.
Si se analiza el término griego ‘μεταβολή’ se halla estructurado con el prefijo ‘meta’, que significa “después de”, o “junto con”. Sumado a la raíz ‘βολή’ (bole), que es el verbo que alude a la acción de arrojar. Algunos estudiosos tomaron como base la partícula ‘bolismo’, como referencia del proceso metabólico, para diseñar palabras como anabolismo y catabolismo.
Por lo tanto, el metabolismo se puede definir como la cualidad de todo ser vivo para generar reacciones químicas en su organismo, para que se sinteticen las sustancias compuestas eligiendo otras más simples, o reduciendo aquellas de índole compleja, en otras más sencillas.
Metabolismo rápido o lento
Aquellos con un metabolismo más acelerado, por lo general presentan procesos en la digestión más rápidos, lo que equivale a que pueden asimilar los alimentos en tan sólo una hora, a diferencia de quienes poseen un metabolismo lento, pues necesitan mucho más tiempo para digerir la comida, al punto de que sentir como si acabaran de comer, luego de más de dos horas de la última ingesta.
Una característica de los individuos con metabolismo rápido, es que su cuerpo suele ser más caliente, ya que toda la máquina orgánica se enfoca en procesar mayor cantidad de energía, razón por la que todo el sistema muscular realiza mayores esfuerzos y esto incrementa la temperatura corporal. Al revés ocurre con las personas de metabolismo lento, quienes con frecuencia son más friolentos.