Definición
Adjetivo que hace referencia de una actividad que genera ganancias monetarias suficientes.
Etimología
Este vocabulario posee la acepción etimológica de “algo capaz de generar remuneración” y se deriva del sufijo latino ‘able’ (en español: “que puede”), junto con la voz ‘renta’, a su vez originada de ‘rendita’, cuyo sentido es “devuelto con intereses”.
Se puede decir que rentable corresponde a todo lo que produzca un beneficio monetario de manera frecuente. La noción se halla asociada al crédito, definido como la renta que se renueva y rinde un capital; como tal, la rentabilidad es aquello capaz de generar una renta o ganancia apropiada.
Por consiguiente, la renta equivale al interés que se gana de algo. Corresponde a un lucro que se obtiene gracias a un capital bien invertido. Lo rentable es eso con lo cual se puede ganar dinero. Por ejemplo, si alguien destina 5 mil euros en una inversión que promete una rentabilidad de mil dólares por mes, se podría catalogar como un negocio rentable, pues en un año no sólo habría recuperado la inversión, sino ganado 7 mil euros más.
Asimismo ocurre con una idea de emprendimiento que necesita invertir 2 mil dólares mensuales, para poder obtener ganancias de 3.600 dólares en ese mismo lapso. Tal inversión, también resulta rentable.
Empero, si un individuo se ve obligado a cumplir con un horario laboral de 12 horas por día, en un trabajo por el que le pagan 300 dólares al mes, se podría estimar que se trata de una actividad muy poco rentable, pues incluso los gastos diarios de movilidad y viáticos en general, serían mayores que el sueldo.
El concepto de rentable no es objetivo, sino que varía según la perspectiva de las personas. La rentabilidad brinda beneficios, pero si éstos se quedan cortos, será una situación financiera que no se catalogue como rentable. Todo depende de las variables de las circunstancias económicas.