Etimología

Esta palabra en su etimología procede del latín ‘separāre’ y a su vez, del italiano ‘separare’.

Esta terminología también se emplea para designar la acción de constituir conjuntos homogéneos con elementos que se encuentran entremezclados, o identificar distintas cosas sin caer en la confusión o la mezcla.

En otro sentido, puede usarse para denominar la acción de sujetar a dos individuos que se enfrentan violentamente, para que no sigan agrediéndose.

En lo que respecta de lo laboral, en el habla hispana se utiliza esta palabra asociada al hecho de retirar a un trabajador de su empleo o despedirlo.

Se trata de un verbo con diversos usos. En un contexto de viaje, denota la acción de enviar por otro camino diferente a algunas personas, animales o vehículos que se dirigían a un lugar por la misma vía, en dos grupos.

Uno se puede separar de otra persona con la que se mantenía una relación, o igualmente, de alguna institución, agrupación, entidad, club, etc.

En el caso de que una pareja de enamorados conviva y por algún motivo decida irse a vivir cada uno aparte, se habla de separar. Puede realizarse de manera directa y personal, o acudirse a la intervención de las autoridades para efectuar una separación legal, que involucra los bienes materiales, los derechos y deberes con los hijos (si los hay), entre otros aspectos.

También, contiene el significado de renunciar a alguna idea, tendencia, concepto, opinión.

En el ámbito político, significa el proceso por el cual una comunidad se torna soberana e independiente, con relación a otra a la que estaba ligada.

En materia de Derecho, separar es renunciar a reclamar, a hacer valer un derecho, a llevar a cabo alguna acción legal, etc.

En lo ambiental, separar tiene que ver con el reciclaje. Se habla de “separar desde la fuente”, que es seleccionar la basura y disponerla en bolsas diferenciadas por categorías de residuos sólidos u orgánicos. Igualmente, se separan los envases en virtud de su material, como plástico, vidrio, metal, etc.