Definiciona

metresa

M - abril 30, 2024

Definición

Sustantivo femenino. Amiga, querida. Este vocablo en la actualidad no es muy usado; se refiere a una mujer amistosa, que le gusta interactuar y conversar con personas, establecer una relación de cariño, afecto, inclinación o la voluntad a una persona en particular; también se le dice a una amiga o querida, digna o merecedora de ser respetada o admirada. La dama a quien se sirve.

Etimología

De acuerdo a Eduardo de Echegaray este vocabulario es derivado de «maestra», del catalán «mestressa», con la acepción de dueña, mujer de un maestro de oficio y ama de llaves, amiga y querida. No obstante, la RAE recopila el término con la acepción de «la dama a quien se sirve», y la pone como una voz puramente francesa. Latín. Foemina adamata.

Eventualmente pudo pasar del francés al catalán como la dama a la que se sirve y que entabla una relación de amistad y cordialidad; una «patrona amiga». Y en un sentido todavía más amplio, una mujer amistosa, afable y cordial, «dueña» por la deferencia que su cariño y voluntad le merece.

Posiblemente por su acepción amplia en el sentido de «mujer amistosa», o «mujer con la que se entabla una relación de amistad», en algunos ámbitos el término se entiende como una mujer que mantiene una relación romántica y a menudo clandestina con un hombre casado, especialmente refiriéndose a la sociedad medieval y renacentista, en donde estas relaciones extramatrimoniales eran consideradas tabú en muchos contextos sociales, si bien la figura de la «metresa» era común y a veces incluso aceptada en ciertas clases sociales, y por consiguiente, en algunos casos tenían un estatus social y económico considerable.

Así mismo, el término latino «foemina adamata» puede traducirse como «mujer amada» en español, destacando el concepto de una mujer que es objeto de amor o cariño en el contexto del idioma latino, pero que puede extrapolarse al concepto de relación extramarital.

Vudú haitiano

Por otra parte, el término «metresa» parece adquirir una connotación particular en la magia vudú haitiana y dominicana, donde se incorpora a la cosmología de las 21 divisiones, un panteón sincrético de espíritus con características distintivas. Cada uno de estos espíritus, conocidos como «metresas», posee atributos únicos, incluyendo colores, gustos y cualidades específicas. Algunos ejemplos notables de «metresas» en este contexto incluyen:

  • Anaísa Pie – Santa Ana: Considerada la «Reina del amor y del hogar».
  • Belíe Belcán – San Miguel: Asociada con el dominio del mal y los demonios.
  • Filomena – Santa Marta: Vinculada al dominio sobre los hombres.
  • Ogún Balenjod – San Santiago: Con capacidad para controlar la guerra y los espíritus guerreros.
  • El Barón del Cementerio – San Elías: Asociado con el dominio del mundo de los muertos.
  • Metresili – La Dolorosa: Con la capacidad de otorgar riquezas y amor.

Es importante destacar que en este contexto, el término «metresa» se utiliza de manera diferente a su connotación tradicional, y se refiere a estos espíritus o entidades espirituales en lugar de al trato con una patrona amistosa o la «dama a la que se sirve».

Metresa en la Literatura

Con el tiempo, el uso y acepción del término «metresa» han disminuido en la sociedad moderna, pasando de la acepción original que hemos visto, al de una extrapolación a un contexto de «amor clandestino», mismo que también ha pasado el desuso en gran medida por los cambios en las normas sociales y a una mayor aceptación de relaciones no convencionales.

En todo caso, si nos atenemos a estas connotaciones, podemos decir que la figura de la «metresa» ha desempeñado un papel destacado en la literatura a lo largo de la historia, sirviendo como personaje central en numerosas obras literarias. Su presencia en la literatura ha permitido explorar una variedad de temas relacionados con el amor, la pasión, la moralidad y las complejidades de las relaciones humanas. A continuación, se examinan algunos ejemplos notables de la representación de la «metresa» en la literatura:

«La Dama de las Camelias» de Alexandre Dumas hijo

Una de las representaciones más icónicas de una «metresa» en la literatura se encuentra en la novela «La Dama de las Camelias» escrita por Alexandre Dumas hijo. La protagonista, Margarita Gautier, es una cortesana parisina que mantiene una relación apasionada con el joven Armando Duval. La novela aborda temas de amor, sacrificio y la lucha contra las convenciones sociales. Esta obra se convirtió en un clásico y ha sido adaptada en numerosas ocasiones en teatro y cine.

«La Traviata» de Giuseppe Verdi

La ópera «La Traviata» de Giuseppe Verdi está basada en la novela «La Dama de las Camelias» de Dumas hijo y presenta una trama similar centrada en la vida de una cortesana, Violetta Valéry. La ópera explora la tragedia de un amor apasionado y prohibido entre Violetta y Alfredo Germont, y cómo las convenciones sociales y la enfermedad los separan. «La Traviata» es una de las óperas más populares y conmovedoras del repertorio operístico.

«Anna Karenina» de Lev Tolstói

Aunque no se describe explícitamente como una «metresa», el personaje de Anna Karenina en la novela homónima de Lev Tolstói encarna muchas de las características asociadas con este tipo de relaciones. Anna mantiene una relación adúltera con el conde Alexei Vronski, lo que desencadena una serie de eventos que exploran temas de pasión, sociedad y moralidad en la Rusia del siglo XIX.

«Madame Bovary» de Gustave Flaubert

La novela «Madame Bovary» escrita por Gustave Flaubert presenta a Emma Bovary, quien no es una «metresa» en el sentido tradicional, pero su deseo de una vida romántica y apasionada la lleva a mantener relaciones extramatrimoniales. La obra es una crítica a la búsqueda insaciable de pasión y el descontento en la vida conyugal.

«Memorias de una Geisha» de Arthur Golden

En esta novela, que explora la vida de las geishas en Japón, se abordan las complejidades de las relaciones entre las geishas y sus amantes, quienes a menudo ocupan un lugar especial en sus vidas. Aunque no se utiliza el término «metresa», la novela ofrece una visión de cómo estas mujeres eran vistas y vivían en una sociedad tradicional japonesa.

Estos ejemplos literarios muestran cómo la figura de la «metresa» ha sido una fuente de inspiración para los escritores a lo largo de los años, permitiendo la exploración de temas profundos y universales relacionados con el amor, la pasión y las restricciones sociales. Su presencia en la literatura ha enriquecido la comprensión de las complejidades de las relaciones humanas.