Definición
Sustantivo femenino. Se define como la imposibilidad de lograr o conseguir un deseo o necesidad. También, alude a una emoción de decepción y depresión, por la no consecución de lo que se quiere.
Etimología
Esta terminología presenta la noción etimológica de estado psicológico de decepción que se genera por los resultados negativos en el propósito de obtener algo. Se derivó de la voz latina ‘frustratio’ y ‘frustrationis’, que traducen al español frustrar, errar, tergiversar. Propiamente, este verbo ‘frustrar’, se adoptó del adverbio del latín ‘frustra’, que significa “en vano”.
Los especialistas en etimología de la antigua Roma, asociaban el vocablo ‘frustra’, con la expresión ‘fraus’ (engaño) o también concebido en términos jurídicos como el perjuicio ocasionado por un engaño. En el latín antiguo, al igual se aprecia la denominación ‘frudis’. Algunos lingüistas lo asocian con la raíz de origen indoeuropeo ‘dhwer’, con la noción adoptada derivada del sánscrito y del latín, de causar ruina por medio de engañar, aunque tan sólo se toma como una hipótesis.
Los psicólogos definen la frustración como un síndrome que presenta diversas sintomatologías, asociadas al desmoronamiento sentimental, que se experimenta en distintos grados, como consecuencia de numerosos factores y que deja múltiples secuelas.
Las consecuencias del estado de la frustración en los seres humanos, depende de su forma de ser y de diferentes causales complejos de dominar. Una emoción de frustración puede conllevar al surgimiento de trastornos en la psicología, en el instante en que alcanza un nivel patológico y por consiguiente, se requiere ayuda especializada.
La frustración implica un estado de cohibición de una satisfacción esencial. Tal es el caso de un pequeño que es hijo único, que siente frustración cuando se entera que su madre está esperando otro primogénito. Al nacer el otro niño, en el primero la frustración se va a reflejar en un comportamiento violento y celoso.
El sentimiento de la frustración es bastante negativo y podría ocasionar distintas reacciones.
Los expertos en psicología que se han enfocado en investigar la frustración, han advertido que es posible lidiar con esta condición, por medio de tres maneras concretas. En primera instancia, se encuentra la agresión, que conlleva a que el individuo que la siente, se exprese iracundo y se desahogue lanzando golpes hacia ese algo o alguien motivo de su estado frustrado.
Tal es el caso de un competidor de carreras que no logra figurar como vencedor y su frustración es tal, que empieza a darle patadas y puños a su vehículo.
En segunda instancia, se encuentra la denominada ayuda de la huida. Tal como lo indica su nombre, señala lo que realiza el individuo que desea utilizarla como una vía para desintegrar su estado frustrado; consiste en esquivar la frustración, para que inclusive no llegue a desarrollarse y deshacerse de ésta una vez se manifieste.
La tercera manera de reaccionar ante algún evento o condición frustrante, es conocida como “sustitución”, mima con la cual es posible cambiar la situación que se está afrontando, por otra mucho más calmada en la que no se experimente tales emociones.