Sistemas cerrados

Definición

El término “sistemas cerrados” se emplea en el ámbito del análisis y diseño de sistemas para describir aquellos sistemas que funcionan de manera independiente y no establecen interacciones significativas con su entorno. A diferencia de los sistemas abiertos, los sistemas cerrados son autónomos y operan sin considerar el contexto o el medio ambiente que los rodea.

Etimología

La palabra “sistema” proviene del latín tardío “systēma”, que a su vez deriva del griego σύστημα, sýstēma. Esta raíz refleja la idea de un conjunto organizado de elementos interconectados. Por otro lado, el término “cerrado” se origina en el participio del verbo “cerrar” y tiene su raíz en el latín vulgar «serrare”, una variante de “serāre”, que a su vez deriva del término latino «sera”, que significa “cerrojo”.
La raíz “systēma” en “sistema” sugiere la noción de elementos entrelazados que forman una entidad cohesiva. En el contexto de “sistemas cerrados”, esta cohesión es menos permeable, ya que estos sistemas operan de manera autónoma y aislada.

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Por otro lado, el término “cerrado” y su relación con “cerrar” y “cerrojo” enfatizan la idea de algo que está sellado o protegido, sin apertura hacia el exterior. En el contexto de “sistemas cerrados”, esta idea se refiere a sistemas que funcionan de manera independiente y no dependen de influencias externas.

Características de los sistemas cerrados

Los sistemas cerrados presentan una serie de características distintivas que los diferencian de los sistemas abiertos. Estas características profundizan en su funcionamiento y su papel en diversos contextos:

1. Autonomía y autocontenido

Los sistemas cerrados son inherentemente autónomos, lo que significa que son capaces de operar sin requerir intervención externa de manera constante. Su funcionamiento se basa en las reglas y procesos internos que han sido predefinidos.

2. Limitada interacción con el entorno

A diferencia de los sistemas abiertos, los sistemas cerrados tienen una interacción limitada con su entorno. No intercambian información, energía o materia con el exterior de manera significativa, lo que puede dificultar su capacidad de adaptarse a cambios externos.

3. Estabilidad y predictibilidad

Debido a su funcionamiento interno autónomo y la falta de influencias externas, los sistemas cerrados tienden a ser más estables y predecibles en comparación con los sistemas abiertos. Sus resultados y comportamientos son consistentes a lo largo del tiempo.

4. Reglas predefinidas

Los sistemas cerrados operan según reglas y procesos predefinidos que han sido programados en su estructura. Estas reglas determinan cómo se comporta el sistema en diferentes situaciones, lo que puede ser beneficioso para mantener la consistencia.

Clasificación de sistemas cerrados

Los sistemas cerrados pueden clasificarse en diferentes categorías según sus aplicaciones, usos y características particulares. Algunas de estas clasificaciones incluyen:

1. Sistemas tecnológicos

Dentro de esta categoría se encuentran sistemas informáticos y otros sistemas tecnológicos que operan en entornos aislados y controlados. Estos sistemas pueden estar diseñados para proteger la seguridad de los datos y minimizar la exposición a amenazas externas.

2. Modelos teóricos

En algunos campos, como la teoría matemática de sistemas, los sistemas cerrados se utilizan como modelos teóricos para comprender y analizar fenómenos específicos. Estos modelos simplifican la realidad al eliminar influencias externas y centrarse en las relaciones internas.

Ejemplos de sistemas cerrados

Para ilustrar el concepto de sistemas cerrados, es útil explorar algunos ejemplos concretos:

1. Software de simulación

Los programas de simulación en la industria o la investigación científica a menudo operan como sistemas cerrados. Estos programas siguen reglas predefinidas para simular situaciones y eventos, sin interactuar con factores externos que podrían afectar el resultado.

2. Experimentos controlados

En la investigación científica, los experimentos controlados en laboratorios pueden considerarse sistemas cerrados. Los investigadores manipulan variables internas mientras minimizan la influencia de factores externos para observar efectos específicos.

3. Dispositivos autónomos

Los dispositivos autónomos, como los robots programados para realizar tareas específicas, operan como sistemas cerrados en ciertos contextos. Siguen algoritmos internos sin depender de interacciones externas.

Conclusión

Los sistemas cerrados, con su característica autonomía y limitada interacción con el entorno, representan un aspecto fundamental en la teoría de sistemas y en diversos ámbitos de aplicación. A lo largo de esta exploración, hemos profundizado en la definición y etimología de “sistemas cerrados”, destacando su origen en el latín tardío y el griego. La raíz «systēma” en “sistema” revela la noción de elementos interconectados, mientras que el término “cerrado” subraya la idea de algo protegido y sellado.
Además, hemos examinado detalladamente las características que definen a los sistemas cerrados. Su autonomía, estabilidad y reglas predefinidas los convierten en herramientas valiosas en contextos donde la consistencia y la predictibilidad son prioritarias. La limitada interacción con el entorno, si bien puede ser una ventaja en términos de control, también puede limitar su capacidad de adaptación a cambios externos.

La clasificación de sistemas cerrados en diferentes categorías, como sistemas tecnológicos y modelos teóricos, ilustra su versatilidad y aplicabilidad en diversas disciplinas. Los ejemplos presentados, desde software de simulación hasta dispositivos autónomos, subrayan cómo los sistemas cerrados son utilizados para modelar y comprender fenómenos específicos en la práctica.

En última instancia, los sistemas cerrados son un componente esencial en la comprensión de sistemas complejos. Al explorar sus características, ejemplos y clasificaciones, hemos obtenido una visión más profunda de cómo operan y cómo pueden ser aplicados en una variedad de campos. La etimología de los términos subyacentes en “sistemas cerrados” nos recuerda la importancia de protección y control en el diseño y funcionamiento de estos sistemas autónomos.

Bibliografía ► Definiciona.com (29 agosto, 2023). Definición y etimología de Sistemas cerrados. Recuperado de https://definiciona.com/sistemas-cerrados/