Patriarcado

Definición

Sustantivo masculino. Se trata de la manifestación e institucionalización del dominio masculino sobre las mujeres y la sociedad en general, históricamente se ha encargado de exhibir una distribución desigual del poder en favor de los hombres, y tiende a acentuar este diferencia para conservar y conseguir más privilegios. Es el constructo sobre el cual se erige la sociedad occidental. Este concepto se emplea en las ciencias sociales, especialmente la antropología, la sociología y los estudios feministas.
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Etimología

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El término patriarca proviene del latín y este del griego patriarches, donde patria significa descendecia, familia, y archo, mandar. Está directamente ligado con los personajes de la biblia que fueron los primeros jefes de familia, siendo Abraham el principal representante por fundar le pueblo hebreo, y porque los varones de su descendencia fueron jefes de las tribus de Israel. en este contexto aparece el patriarcado señalando el lapso en el que el pueblo hebreo permaneció errante y sin una patria, desde la salida de Abraham de Ur, hasta el asentamiento de Jacob (su nieto) y los doce hijos de este en Egipto.

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Después de esto pasó a convertirse en una jerarquía eclesiástica de la iglesia cristiana primitiva, y en la actualidad aún algunas iglesias la usan para designar un grupo de diócesis.

La teoría del origen del patriarcado, tal como lo reconocemos hoy en día, se remonta a  los colectivos humanos cuya subsistencia dependía del trabajo agrícola y donde la mujer era parte de todas las actividades orientadas a la producción de alimentos y productos necesarios, incluida la caza, el dominio del fuego y hasta las pinturas rupestres, esto junto a la domesticación de animales y la agricultura itinerantes.

La degradación de la mujer

La degradación de la condición femenina tendría lugar con el desarrollo de sociedades agrícolas sedentarias, esto porque debido a 3 factores:

1. Los oficios de horticultura y ganadería dependían de la fertilidad de los terrenos, así que una vez agotados el grupo debía desplazarse hacia un nuevo espacio, esta dinámica obligo a que los embarazos fueran más espaciados ya que se requería que todos y todas en el grupo pudiesen movilizarse por igual.

2. La búsqueda de nuevos territorios también estaba marcada por los cambios climáticos o catástrofes naturales, o bien por asuntos demográficos, por la sobrepoblación,

3. La práctica de la exogamia, donde tanto hombres como mujeres se relacionan con otros grupos para evitar debilitar al grupo con la endogamia, hoy conocida como incesto.

La primera limitante no tuvo lugar en aquellos asentamientos que se ubicaban en los deltas de los ríos y cuyos terrenos tenían una fertilidad que se renovaba por sí sola, de esta forma al establecerse de manera permanente lo mejor para defender ese territorio de los grupos nómadas era garantizar una población numerosa, de aquí que se hizo una división sexual del trabajo, en la que la fuerza física que resulta mayor en lo hombres prevalercerá sobre la resistencia biológica acusada en las mujeres, por eso ellas se dedicaron a la maternidad intensiva y los ellos a trabajar duramente para el mantenimiento de estas familias.

De aquí se desprende la dependencia económica de la mujer y es cuando el hombre aprovecha este poder para someterla forzosamente, lo que se traduce en el desarrollo de la dominación: económica, porque, no pueden ser propietarias ni herederas; física, por la fuerza y espiritual, por la constante denigración y opresión de sistemas legales, morales y religiosos.

Las mujeres se vieron entonces rebajadas a una condición subhumana, pero las tribus con esta mentalidad resultaron tan competitivas y poderosas que en escasos milenios lograron expandirse por todo el mundo, desplazando y marginando a etnias más débiles, hasta incorporar tanto al machismo exacerbado como la violencia sexual, y convertirlos en un rasgo característico del comportamiento social humano. Es por la tradición de estas prácticas que se han naturalizado, que se han apropiado y por ello que salta a la vista la invisibilización continua de las mujeres. Basta con reparar en su efectiva omisión en la historia.

Características del patriarcado

Se caracteriza, según Marcela Lagarde, por establecer una oposición entre el género masculino y el femenino, por nutrir una enemistad histórica entre las mujeres y porque opera a través del machismo.  Así mismo, por el ejercicio de esa autoridad desde diversas instituciones, en la unidad familiar sobre mujeres e hijos/as, y de la línea prevalencia de la descendencia paterna sobre la materna; a nivel social también somete a niñas y niños, a la juventud y a todos aquellos grupos que por clase social, origen étnico, preferencia religiosa, sexual o política sean (en apariencia) minoritarios o diferentes.

Usos y aplicaciones de patriarcado

Para qué sirve

Existen diferentes grados de opresión patriarcal cuyas diferencias dependen de la evolución y desarrollo de cada sociedad. Como se trata de un modelo que se a ido adaptando a cada una de las etapas podemos decir que ha cambiado sus formas pero el fondo sigue siendo el mismo.

Para abordar sólo algunos de los aspectos donde se manifiesta el patriarcado podemos citar los socioeconómicos (por ejemplo, la reducción de la mujer y el hombre a meros estereotipos, y en consecuencia la falta de independencia de las mujeres, la división injusta del trabajo, pues son las mujeres las encargadas de aquellos que justamente no son remunerados o si lo son resultan mal pagos y de perfil asistencial, y  baja responsabilidad, la violencia de género, el control sexual a través de la penalización del aborto y la maternidad obligatoria, etc.), el psicológico (la inducida falta de autoestima en las mujeres garantizada por el entorno y la educación, el desconocimiento y la insatisfacción permanente de/con su cuerpo, el miedo a la libertad, la ausencia de expectativas de éxito y pocos intereses, el sentimiento perpetuo de inseguridad física y debilidad, etc.), y el cultural (hay una transmisión automática a nivel intergeneracional de mecanismos que perpetúan el sistema pratiarcal, como por ejemplo, el funcionamiento, alcance y esquema de la familia, la implantación de estereotipos a través de los medios de comunicación, etc.).

Se reconocen como insumos del sistema patriarcal dos conceptos claves: la heterosexualidad obligatoria y el contrato sexual.

Por todo esto, el patriarcado constituye una categoría de análisis fundamental para la política, el pensamiento y la historia de las mujeres, en pro de su emancipación. Aquí es importante mencionar que el feminismo es la antítesis del patriarcado, y que como movimiento social y político plantea un cambio de paradigma global con alternativas de desarrollo humano y libertad tanto para las mujeres como para los hombres, representando con esto una de las revoluciones más importantes en las últimas décadas, con impacto político y cultural, y además de una forma no cruenta.

Por: Carolina Cortés G.

Bibliografía ► Definiciona.com (26 abril, 2014). Definición y etimología de patriarcado. Recuperado de https://definiciona.com/patriarcado/