Definición
La etología es una rama de la biología y de la psicología que estudia el comportamiento animal. Con la ayuda de métodos inherentes a las ciencias de la naturaleza, la etología estudia el comportamiento de los animales y del hombre y se esfuerza en analizar sus elementos fisiológicos fundamentales, por lo cuál también puede denominársela fisiología del comportamiento. La etología se propone comprender la razón o causalidad del comportamiento de los animales, su función adaptativa y su cambio evolutivo o filogenético. De acuerdo al aspecto específico que se esté estudiando, la etología se divide en: ecoetología, sociobiología, neuroetología y etopsiquiatría.
Etimología
La palabra etología está formada por el prefijo griego etho- y por la raíz logos. Etho se deriva de la palabra ethos (ηθος) que significa costumbre, conducta o manera de hacer las cosas; logos (λóγος) significa ciencia o conocimiento. Así, la etología es la ciencia que se ocupa de describir y comprender el comportamiento.
Historia de la etología
Aunque se reconoce que la fundación de la etología como ciencia del comportamiento se dio en el siglo XX gracias a Konrad Lorenz, el interés pro el comportamiento animal ha estado presente en toda la historia de la humanidad; por ejemplo, Aristóteles, quién además de filósofo fue un gran naturalista, se preocupó por comprender ciertos aspectos de los animales incluyendo su comportamiento, igualmente, gracias a las expediciones botánicas y de nuevos territorios emprendidas a lo largo del siglo XVIII supusieron una renovada atracción hacia el mundo natural incluyendo la fauna, de esta época sobresale especialmente J. Ray, Leroy y otros naturalistas franceses.
Durante el siglo XIX y la primera parte del siglo XX las investigaciones de Spalding y Darwin contribuyeron a replantear lo que hoy se entiende por la etología sobre todo desde el aspecto filogenético o evolutivo. La segunda parte del siglo XX estuvo separada teóricamente por dos escuelas psicólogicas que concebían el comportamiento de un modo distinto: el conductismo americano y el naturalismo europeo; finalmente hubo una concertación teórica. En este escenario histórico aparece Konrad Lorenz quien es considerado como uno de los padres de esta disciplina.
Estudios en animales
Aunque los ratones han sido muy utilizados en los estudios de comportamiento animal como sujetos experimentales, el estudio del comportamiento de los chimpancés y demás animales parecidos a los seres humanos, pueden esclarecer ciertos aspectos de nuestro comportamiento.
Algunos biólogos han aceptado como principio que el fin constituye el elemento motor de cualquier acción. Por el contrario, la etología admite como principio de partida que el comportamiento puede ser analizado desde un punto de vista causal; en general, un comportamiento se manifiesta con movimientos o series de movimientos instintivos. El análisis muestra siempre algunos movimientos rigurosamente estereotipados, característicos de la especie.
Mecanismos de coordinación
El comportamiento se basa sobre todo en actividades musculares. El orden en que se manifiestan determinadas acciones se alcanza mediante mecanismos nerviosos, denominados mecanismos de coordinación.
El análisis del comportamiento demuestra que las actividades instintivas aisladas y los mecanismos de coordinación en que se basan, se integran entre sí, de modo que permiten a los centros superiores regular o inhibir los mecanismos aislados. El conjunto de todos los comportamientos puede representarse mediante numerosas pirámides superpuestas parcialmente.
El comportamiento instintivo o cogénito
Éste es uno de los campos más importantes de la investigación etológica. Un comportamiento se puede considerar como congénito, innato o hereditario cuando aparece en todos los individuos de la misma edad y del mismo sexo en una misma especie.
En casi todos los grupos animales se encuentran ejemplos típicos de esta coordinación hereditaria, como la parada nupcial de los ánades, la actividad de determinados peces que ventilan sus huevos, o la posición de alarma de la oruga esfinge.
Las actividades instintivas se componen de movimientos instintivos y de tropismos. En el caso de los tropismos, el estímulo externo debe durar todo el tiempo que dure la reacción: determina una actividad muscular que orienta ala organismo hacia la fuente del estímulo. En el caso de los movimientos instintivos, una vez iniciado, puede interrumpirse el estímulo sin que por ello se interrumpa el movimiento.
Comportamientos específicos
La apetencia es un concepto que subdivide el comportamiento global en dos componentes: la acción final, que comprende un conjunto de comportamientos, y que de por sí es ya simple y determinada, y el comportamiento de apetencia, en el que la búsqueda de la situación inductora es, por el contrario, variable y orientada hacia un objetivo.
Los inductores pueden ser intraespecíficos o inductores de varias especies entre sí. Entre los tipos de inductores podemos diferenciar movimientos del cuerpo, estructuras de forma o de color, expresiones sonoras e informaciones olfativas.
El aprendizaje es un fenómeno de origen nervioso central que modifica los mecanismos nerviosos bajo la influencia del medio o mundo exterior y que se basa en las modificaciones aportadas a las células nerviosas por estímulos que actúan sobre la ulterior actuación de la excitación. Mediante el aprendizaje se puede conseguir que un solo estímulo desencadene una respuesta automática similar a una respuesta instintiva congénita, los mamíferos son los animales mejor capacitados para el aprendizaje. Las modificaciones del mecanismo innato de inducción tienden por regla general a hacer que la situación sea capaz de promover una inducción cada vez más específica. La modificación del comportamiento congénito, a resultas del aprendizaje, es muy importante para la etología.
La agresividad puede ser interespecífica o intraespecífica se da sobretodo en los animales carnívoros y se manifiesta por regla general en la posesión de una presa. La agresividad intraespecífica está en relación con diversos comportamientos sociales, tales como la defensa de un territorio o la lucha por una pareja. No suele llevar a verdaderos combates sino que se trata en muchas ocasiones de comportamientos ritualizados, de amenaza, de imposición, de pacificación o de humildad.
Usos y aplicaciones de la etología
Para qué sirve
La etología se emplea para: domesticación y manejo del comportamiento, diagnosticar y tratar anomalías del comportamiento, minimizar el riesgo de padecer enfermedades derivadas del estrés, incrementar la productividad de animales de consumo y estimar los comportamientos que pueden heredarse.