Definición
Sustantivo femenino. Este termino se refiere a un antiguo imperio que correspondía en la actual Alemania que limitaba al norte con Rusia Prusia y la Sajorna: al oriente con la misma Rusia y los principados danubianos; al Sur, con Turquía, el mar Adriático y en Italia; y al Occidente, con esta última, Suiza y Alemania. Es un país que hace parte de la comunidad europea y la capital es Viena.
Etimología
o procede del latín «austrālis» austral aunque el nombre del país viene del aleman «österreich».
El nombre Austria se deriva de la palabra germánica Ostarrîchi, que fue utilizada por Carlomagno en referencia a las tierras más orientales de su imperio (Austria). Este término se traduce como «reino oriental» o «pueblo oriental».
Esta terminología es una latinización de Habsburgo, una familia noble austro-bávara de la que surgió el emperador Maximiliano I (1459-1519). El título imperial de Habsburgo fue adoptado por Leopoldo I (1640-1705), quien fue rey y emperador de Austria.
Se discute la etimología exacta de «Ostarrîchi». Algunas autoridades lo derivan del franco oriental *hass-rīki («tierra a este lado del Rin») (y por lo tanto lo ven como una referencia al territorio dominado por Carlomagno), mientras que otros lo interpretan como una alusión de la bávara Marcha orientalis ( la Marcha del Este).
Una historia convulsionada
La historia de Austria comenzó en el año 976 dC, cuando los magiares invadieron y colonizaron la zona. La región estaba escasamente poblada en ese momento, pero no pasó mucho tiempo antes de que se produjera un auge demográfico.
En 1246, Austria pasó a formar parte del Sacro Imperio Romano Germánico. Esta fue una era de gran prosperidad y en 1335, se había convertido en uno de los países más grandes de Europa.
Empero, este período también fue caracterizado por conflictos con Hungría, que a menudo trató de apoderarse de partes del territorio. En 1529, Austria volvió a ser un estado independiente después de haber estado ocupada por los turcos durante casi 150 años.
La monarquía de los Habsburgo gobernó el imperio hasta 1918 (con una interrupción durante la Primera Guerra Mundial). Se derrumbó como resultado de la derrota en la Primera Guerra Mundial y la disolución de la monarquía dual en 1918. La mitad austriaca se fusionó con Alemania bajo el dominio nazi durante la Segunda Guerra Mundial, pero otras partes fueron ocupadas por Italia y Francia. Después de la Segunda Guerra Mundial, Austria formó parte de la Alemania Occidental ocupada por los alemanes (1947-1955), después volvió a ser independiente.
El Imperio austríaco, también conocido como Imperio austrohúngaro, era un imperio multinacional y una de las principales potencias del mundo. Se formó en 1867 al fusionar los Reinos de Hungría y Bohemia con el Reino de Dalmacia y Croacia, que en ese momento era parte de Hungría. En 1871, se añadieron al imperio Bosnia-Herzegovina, Transilvania, Croacia y Eslovenia. El Imperio Otomano cedió estos territorios en 1879.
En la antigüedad, la mayor parte de lo que ahora es Austria fue colonizada por celtas y germanos. Más tarde, se convirtió en parte del Imperio Romano y luego en parte del Sacro Imperio Romano Germánico. En 1804, los ejércitos franceses de Napoleón Bonaparte también conquistaron gran parte de Austria en este momento; no obstante, después de la derrota de Napoleón en Waterloo en 1815, Austria recuperó su independencia bajo el emperador Francisco José I (gobernó entre 1848 y 1916).
El primer gobernante de Austria fue el duque Federico I, que gobernó desde 1230 hasta 1246. También se le considera el fundador y se le atribuye la creación de la bandera austriaca.
En 1358, el duque Federico IV comenzó a construir ‘Schloß Ambras’, en Innsbruck. El castillo cuenta con una colección de armaduras y armas que datan del siglo XIV. Ahora es un museo que contiene más de 200 armaduras, así como pinturas y esculturas de Hans Makart y Josef Madlener.
Durante el siglo XV, se fundaron varias ciudades en Austria, incluidas Linz (1421), Graz (1469), Wiener Neustadt (1483), Bruck an der Mur (1504), Rattenberg (1521) y Freistadt (1556). Todas estas ciudades todavía existen hoy, excepto Bruck an der Mur, que fue destruida por los turcos otomanos en 1683 durante su invasión, cuando la mayoría de los residentes huyeron a través del río Danubio hacia Hungría; solo quedaron unas 100 personas en lo que una vez fue Bruck an der Mur, pero que se conocía como «Verruckt» o «locura».
Actualmente, Austria es una democracia representativa parlamentaria con nueve estados o provincias (Länder). La ciudad capital es Viena; otras ciudades importantes incluyen Graz, Linz y Salzburgo.
Los lugares más representativos de Austria
La atracción turística más popular es el Palacio de Schönbrunn, que se construyó como residencia imperial de verano para los Habsburgo, entre 1749 y 1753 y se amplió durante el siglo XIX, para recibir las visitas del emperador Francisco José I a su esposa Elisabeth (Sisi), quien pasaba allí la mayoría de los veranos. Hasta su muerte en 1898, a los 60 años de edad, por tuberculosis. En el presente, es una de las atracciones turísticas más famosas de Viena, con más de 1 millón de visitantes al año.
En Viena funcionan algunos de los museos más famosos del planeta: el Kunsthistorisches Museum, con obras de Rembrandt y Miguel Ángel; el Naturhistorisches Museum (Museo de Historia Natural), con más de 1 millón de fósiles; y el Kunst Haus Wien (Museo de Artes Aplicadas), que tiene más de 100 años de diseño y arquitectura.
El Palacio de Hofburg también presenta una historia increíble: fue construido en 1298 por el duque Alberto II y luego fue ampliado por el emperador José II en 1747. Ahora, allí yace el Tesoro Imperial (Kaiserliche Schatzkammer), dotado con más de 10.000 objetos hechos de oro y plata.
Innsbruck es otro gran destino para aquellos a quienes les gusta esquiar o hacer snowboard, porque es una de las estaciones de esquí más grandes de Europa. La ciudad también ofrece muchas otras actividades, como el senderismo.
Salzburgo es una de las ciudades más importantes de Austria, porque allí se halla el lugar de nacimiento de Mozart y su lápida. En esta ciudad hay muchos recorridos disponibles a través de todos los lugares importantes, como la casa y el lugar de nacimiento del legendario músico genio.
Innsbruck es otro sitio turístico en Austria, al estar ubicado justo encima de una de las pistas de esquí más famosas de Europa. La ciudad en sí tiene muchos edificios históricos, como iglesias y castillos, que los visitantes pueden disfrutar explorando.
El Palacio de Hofburg en Innsbruck fue construido en 1152, por el Conde Leopoldo IV de Gorizia-Tirol y contiene cientos de habitaciones decoradas con pan de oro y frescos del siglo XVI en adelante.
Innsbruck alberga una de las carreras de esquí más antiguas de Europa todos los años el 6 de enero, la carrera Hahnenkammrennen, que se lleva a cabo desde 1928, cuando comenzó como una carrera de esquí de fondo entre dos pueblos llamados Axams y Wartholzhausen.
La gastronomía de Austria
La comida austriaca es conocida por su sabor y su calidad, y tiene influencias tanto de la cocina alemana como de la cocina hungara y checa. Algunos platos típicos de Austria son los siguientes:
Wiener Schnitzel: un filete de ternera plancha, empanado y frito, a menudo servido con puré de papas y ensalada.
Tafelspitz: un guiso de carne de vacuno cocida a fuego lento con verduras y servida con una salsa de mantequilla y perejil.
Knödel: una especie de dumpling, a menudo servido como guarnición con carnes y guisos.
Apfelstrudel: un pastel de manzana enrollado, con una masa fina y crocante, a menudo servido con nata.
Sachertorte: un pastel de chocolate con un relleno de mermelada de albaricoque y cubierto con una capa de chocolate.
La comida austriaca también es famosa por su gran variedad de embutidos y quesos, como el Bauernschinken y el Liptauer. Por si fuera poco, la cerveza y el vino de Austria son muy apreciados y se utilizan en muchas recetas.