A su vez el término «stalker» proviene del verbo «to stalk» en inglés, que se originó en el siglo XV para referirse al acto de acechar o seguir sigilosamente a alguien o algo, con la intención de cazar o atrapar. El término proviene del antiguo inglés «stealcan», que significa «moverse sigilosamente» o «acechar».

En el contexto tecnológico su utiliza para describir el acto de seguir o perseguir a alguien de manera inapropiada y obsesiva, ya sea en línea o en la vida real. El término se ha popularizado en los últimos años debido a la creciente popularidad de las redes sociales y el fácil acceso a la información personal en línea.

El stalking puede incluir la recolección de información personal, como el lugar de trabajo, la dirección de la casa o el número de teléfono, y puede ser considerado una violación a la privacidad y una conducta inapropiada. Es importante tener en cuenta que el stalking es una actividad ilegal en muchos países y puede tener graves consecuencias legales.

Qué lleva a stalkear?

¿Qué lleva a una persona a stalkear a otra? ¿Cuáles son sus motivaciones? ¿Por qué lo hace? En principio podemos decir que el comportamiento de stalkear puede tener diferentes motivaciones. En algunos casos, puede ser el resultado de una obsesión o fascinación desmedida por otra persona, que lleva al individuo a monitorear sus actividades de forma compulsiva y persistente.

También puede ser una respuesta a un rechazo o a una ruptura en una relación, donde la persona que stalkea busca mantener una conexión con su expareja a pesar de la negativa de ésta. En algunos casos, el comportamiento de stalkeo puede ser el resultado de una enfermedad mental, como un trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) o un trastorno delirante.

En tales casos para el stalker se convierte en algo irreprimible la necesidad de saber qué hace una determinada persona, a qué horas se conecta, qué publica, en dónde está, con quién y, en últimas, saber cada cosa al punto de perturbar la paz de la víctima, invadir su privacidad o convertirse en una forma de acoso.

Procesos legales por stalking

El stalking es una modalidad de acoso, sólo que trasladado al contexto de internet y las redes sociales, es decir, ciberacoso, y, por consiguiente, puede llegar a convertirse en un delito con graves consecuencias legales. Algunos de los casos más famosos de procesos legales por stalking incluyen:

Anna Richardson vs. Johnathan Gleave: En este caso, el presentador de televisión británico Johnathan Gleave fue condenado a dos años de libertad condicional y a una orden de alejamiento después de acosar a la presentadora Anna Richardson durante varios años.

Björk vs. Ricardo López: En 1996, el fanático Ricardo López envió un paquete bomba a la cantante Björk y se suicidó mientras grababa un video en el que hablaba de su obsesión por ella. El caso tuvo una gran repercusión en los medios y llevó a una mayor conciencia sobre los peligros del acoso.

Jodi Arias vs. Travis Alexander: Jodi Arias fue condenada por asesinar a su exnovio Travis Alexander en 2008 después de acosarlo y acecharlo durante meses. El juicio fue ampliamente cubierto por los medios y llevó a un mayor debate sobre el acoso y la violencia doméstica.

Gwyneth Paltrow vs. Dante Soiu: En este caso, el hombre fue condenado por acosar a la actriz Gwyneth Paltrow durante varios años, enviándole cartas y paquetes que incluían juguetes sexuales y joyas. Fue condenado a tres años de libertad condicional y a recibir tratamiento psiquiátrico.

Es importante destacar que el acoso es un delito grave y puede tener consecuencias emocionales y físicas muy graves para la víctima. Así que si consideras que stalkear a alguien no tiene consecuencias, debes pensártelo dos veces. Y si crees que estás siendo acosado, es importante que busques ayuda y denuncies la situación a las autoridades competentes.

Diferentes formas de stalkear

El stalking no sólo se refiere a comportamientos obsesivos llevados a cabo en las redes sociales o en internet, sino que también se refiere a otro tipo de comportamientos que pueden considerarse intrusivos en diferentes áreas. Aquí hay algunos ejemplos de comportamientos que pueden considerarse formas de stalkear:

• Seguir a alguien en persona, ya sea en su casa, lugar de trabajo, escuela u otros lugares que frecuenta.
• Monitorear la actividad en línea de alguien, como revisar constantemente sus perfiles de redes sociales o revisar sus publicaciones en línea.
• Enviar mensajes no deseados por correo electrónico, mensajes de texto, redes sociales u otras plataformas de mensajería.
• Hacer llamadas no deseadas o enviar mensajes de voz no deseados.
• Enviar regalos no deseados o cartas.
• Publicar información personal sobre alguien en línea sin su consentimiento, como fotos o información de contacto.
• Tomar fotografías o videos de alguien sin su consentimiento.
• Dañar o robar la propiedad de alguien.
• Acechar a alguien en línea o en persona.
• Acosar a amigos, familiares o compañeros de trabajo de la persona objetivo para obtener información sobre ella.
• Intentar controlar la vida de alguien, como elegir su ropa, amigos o actividades.
• Amenazar a alguien, ya sea en línea o en persona.