Definiciona

heces

H, Referencia - junio 16, 2020

Definición

Sustantivo plural femenino. Palabra, plural de hez, que se usa para referirse al producto final de la digestión, el cual es expulsado del cuerpo, por medio de la defecación. Esta masa, llamada también materia fecal o excrementos, se constituye de los distintos restos alimenticios, que no han sido absorbidos por el cuerpo durante el proceso digestivo.

Etimología

En cuanto a la etimología de esta palabra, las distintas fuentes señalan que la palabra heces constituye el plural de la palabra «hez», partícula esta que a su vez es identificada como una palabra proveniente del latín faex –que también tiene formas como fex, fecis o faecis- y que era usada en la antigüedad para referirse a los restos que se depositaban después de la fermentación del vino.

Según los estudios filológicos, poco a poco esta palabra “faex” comenzó a sufrir un desplazamiento de significado, comenzando a ser usada para referirse a los desperdicios en general, e incluso a aquellos de la peor índole. De hecho, en algún momento esta palabra también fue usada para hablar de las personas desagradables y negativas para la sociedad.

Con respecto al uso del plural de hez, es decir, heces, para relacionarlo con los excrementos o materia fecal de los individuos, las distintas fuentes señalan que esto debió ocurrir durante la evolución de la lengua romance.

De qué están hechas las heces fecales

Según la Ciencia, las heces se constituyen de todos aquellos elementos que durante el proceso de digestión no han sido absorbidas por algún tramo del aparato digestivo. Por lo general, según señala la Ciencia, esta materia está conformada tanto por restos sólidos y líquidos que no fueron asimilados, como por ejemplo algunas fibras.

Empero, este no es el único compuesto que puede encontrarse en las heces, puesto que dentro de ellas también se encuentran células epiteliales, que provienen de las paredes intestinales, y que se desprenden o se descaman de estas, durante el proceso de absorción de nutrientes. En este epitelio intestinal, también se pueden encontrar una serie de microorganismos y demás sustancias.

Señales para la salud

Aun cuando las heces son vistas como deshecho, y por esto la humanidad busca esconderlas y desecharlas por completo, en realidad, la Ciencia médica coloca especial atención en ellas, por considerar que pueden aportar gran cantidad de información sobre el estado del cuerpo y la salud humana.

Por esto, además de los exámenes médicos especializados, en donde a través de microscopios, pruebas y cultivos, pueden determinar qué microorganismos existen en el cuerpo, los científicos también toman en cuenta otras señales, que incluso pueden ser tomadas en cuenta de forma cotidiana, con el fin de vigilar la salud. Algunas de estas señales son las siguientes: 

Apariencia y consistencia

Esta es la primera señal que se observa en las heces, pues puede indicar sobre todo cómo marcha la digestión. En este sentido, la mayoría de los médicos se guían por la llamada Escala de Bristol, la cual marca los siguientes parámetros: se asume que las heces normales o saludables se hunden, son de color pardas y tienen forma de morcilla, con ligeras grietas en su superficie, así mismo podrían ser lisas como una serpiente.

Por su parte, esta escala también señala que cuando las heces tienen forma de salchicha, compuesta por fragmentos puede ser sinónimode estreñimiento, así como si se muestra como trozos duros, e individuales, que son de difícil evacuación.

De igual manera, si la deposición está bastante acuosa puede indicar que algo no funciona bien, y que la diarrea es una respuesta del organismo. Otro de los signos preocupantes que pueden presentar las heces es el flotar, ya que al hacerlo demuestran que el organismo está presentando dificultad para absorber ciertos nutrientes, o también que hay un exceso de gases en los intestinos.

Olor

Aun cuando las heces, siendo un desecho al fin, no presentan un olor agradable, este elemento es también una señal importante de la salud física. De acuerdo a lo que señalan las distintas fuentes, el olor propio de las heces viene de la desaminación descarboxilación del triptófano, realizada por las bacterias.

Sin embargo, si el olor de las heces suele ser peor que de costumbre o muy fétidas puede que indique que existe una muy mala absorción de nutrientes. También puede referirse a otras afecciones de salud, que van desde una indigestión hasta algo más grave.

Color de las heces

Por otro lado, el color de las heces fecales también es una señal de alerta. En este sentido, los médicos señalan que si las heces son muy pálidas o de un color parecido a la arcilla, esto puede ser síntoma de enfermedades biliares.

Si en cambio las heces son de color negro o rojo, puede indicar que estas llevan sangre, que se ha desprendido en algún lugar del tubo digestivo. No obstante, hay alimentos, como la remolacha o los arándanos, que también pueden producir ese color. El exceso de hierro también podrían colorear las heces de color negro o rojo.

De igual manera, la intensidad del color rojo en las heces puede servir para indicar en qué zona del tracto digestivo se está produciendo el sangrado. Cuando, en cambio, las heces se tornan de color verde, puede que indique que el individuo está consumiendo vegetales de manera abundante.

Por último, si las heces se muestran de color gris, puede que el organismo no esté absorbiendo suficientes grasas o lípidos. Así mismo, si las heces son expulsadas como muy desechas, de color gris, y con alguna acumulación de grasa en ellas, puede que esto indique enfermedades en el páncreas.

Los trasplantes de heces

En la actualidad, los avances en la ciencia médica han llegado a niveles que impresionan a muchos, pues en cuestión de trasplantes ya se cuenta con la posibilidad de realizar el que se desee, incluyendo el trasplante de heces. A esta operación se le denomina técnicamente como bacterioterapia fecal. De acuerdo con las pruebas, funciona de maravilla, pero tiene muchos detractores también con sólidos argumentos.

Consiste en trasplantar las heces de otro individuo en el colon del paciente, con el objetivo de regular el metabolismo y detener  las diarreas que ocasionan infecciones de las denominadas bacterias C. difficile, al igual que si la persona padece una inflamación muy significativa en el intestino. La idea es que las bacterias buenas inmersas en la materia fecal del donante, dentro del organismo del beneficiario, obren colonizando nuevamente el tracto digestivo, notándose las mejorías en poco tiempo.

Las heces pueden provocar combustión espontánea

El imaginario de un gran morro de estiércol y de boñigas humanas, sería una de las cosas más asquerosas y desagradables que se podrían ver. Sin embargo, para los científicos la caca es una materia prima impresionante si se sabe aprovechar. En el campo es normal que los campesinos observen grandes pilas de estiércol de los animales y en unos cuantos días descomponerse. Este proceso biológico pudiera llegar a ser peligroso, no sólo por las bacterias, sino por lo explosivo, debido a la acción de los microorganismos.  

Si se cumplen ciertas condiciones, el calor que generan todas esas bacterias en la descomposición de las heces puede alcanzar el punto en que se genere una combustión espontánea y hacer que todo se incinere en un momento. Este tipo de conflagración se ocasiona más seguido de lo que se piensa, alrededor del planeta.

Heces por la boca

Si se llegan a taponar los intestinos por alguna razón, el bloque genera un efecto reversa en el tracto digestivo y entonces, las heces se devuelven por la boca. El cáncer puede causar estas serias anomalías, o las fístulas intestinales, así como el estreñimiento crónico, la torsión intestinal y otras patologías.