Etimología

La palabra «derecho» proviene del latín «jus», que significa «justicia» o «ley». La palabra «humanos» proviene del latín «humani», que significa «relativo al hombre». Juntas, estas dos palabras formulan la idea de que existen ciertos principios universales de justicia y dignidad que son inherentes a la condición humana y deben ser respetados y protegidos para todas las personas.

El origen de los Derechos Humanos se remonta al 10 de diciembre de 1948, cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó mediante resolución el texto-declarativo en el cual se incluían 30 artículos concernientes a los Derechos Humanos.

La noción de «derechos humanos» es un concepto relativamente nuevo en la historia de la humanidad. Aunque la idea de que todas las personas merecen ser tratadas con justicia y dignidad se remonta a la antigüedad, la formulación moderna de los derechos humanos como un conjunto de garantías universales y protegidos por el estado fue un producto de la Ilustración y las revoluciones políticas del siglo XVIII.

A pesar de que la noción de derechos humanos ha evolucionado a lo largo de la historia, su raíz se encuentra en los escritos de filósofos y pensadores de la Ilustración, quienes argumentaron que los derechos humanos son una condición necesaria para la libertad y la igualdad. Dentro de estos pensadores figuran John Locke, Jean-Jacques Rousseau y Thomas Jefferson, quienes creían que los derechos humanos son anteriores al estado y, por lo tanto, no pueden ser otorgados ni retirados por un gobierno.

La Declaración de Independencia de Estados Unidos, adoptada en 1776, sentó las bases para la concepción moderna de los derechos humanos al afirmar que «todos los hombres son creados iguales» y tienen «derechos inalienables» a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. La Declaración Universal de los Derechos Humanos, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1948, consolidó esta idea al proclamar que todas las personas tienen derecho a la libertad, la igualdad ante la ley y la protección contra la discriminación.

Desde entonces, la idea de los derechos humanos ha sido adoptada por muchos países y se ha convertido en un pilar de la democracia y la justicia internacional. Aunque la protección y el respeto de los derechos humanos sigue siendo un desafío en muchas partes del mundo, su evolución histórica demuestra un compromiso creciente con la idea de que todas las personas merecen ser tratadas con justicia y dignidad.

Características de los derechos humanos

Los derechos humanos tienen como característica inherente y fundamental que  son:
Universales e inalienables
Interdependientes e indivisibles
Iguales y no discriminatorios

La historia de los derechos humanos

El origen de los derechos humanos se remonta a la antigüedad, cuando se formularon las primeras ideas sobre la justicia y la igualdad. En Grecia antigua, por ejemplo, los filósofos como Platón y Aristóteles escribieron sobre la importancia de la justicia y la igualdad. En el derecho romano, se establecieron principios de igualdad ante la ley y protección contra la discriminación.

Sin embargo, fue durante la Ilustración y las revoluciones políticas del siglo XVIII donde se formuló la noción moderna de los derechos humanos. En esta época, los filósofos y pensadores políticos como John Locke, Jean-Jacques Rousseau y Thomas Jefferson argumentaron que los derechos humanos son una condición necesaria para la libertad y la igualdad, y son anteriores al estado.

La Declaración de Independencia de Estados Unidos, adoptada en 1776, sentó las bases para la concepción moderna de los derechos humanos al afirmar que «todos los hombres son creados iguales» y tienen «derechos inalienables» a la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. Esta idea fue luego reforzada por la Revolución Francesa y su Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, adoptada en 1789, que proclamó la igualdad ante la ley y la protección contra la discriminación.

A medida que se desarrollaron como una idea, también se crearon organizaciones internacionales para protegerlos. En 1919, la Liga de Naciones fue fundada con el objetivo de proteger los derechos humanos y la paz en todo el mundo. Después de la Segunda Guerra Mundial, la Liga de Naciones fue reemplazada por las Naciones Unidas, que adoptó la Declaración Universal de los Derechos Humanos en 1948.

Desde entonces, se han convertido en un pilar de la democracia y la justicia internacional. Muchos países han adoptado constituciones y leyes que protegen los derechos humanos, y las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales trabajan para proteger y promoverlos en todo el mundo.

Empero, a pesar de los avances significativos en la protección de los derechos humanos, todavía existen desafíos importantes. En muchas partes del mundo, los derechos humanos siguen siendo violados, incluyendo la tortura, la detención arbitraria, la discriminación y la persecución. Por lo tanto, es importante seguir trabajando para proteger y promover los derechos humanos y garantizar su cumplimiento en todo el mundo.

Asimismo, la noción de derechos humanos sigue evolucionando y ampliándose a medida que se reconocen nuevos derechos y se aborda la discriminación y la injusticia en diferentes ámbitos. Por ejemplo, en los últimos años, se ha prestado más atención a los derechos de las mujeres, las personas LGBTQ+ y los derechos económicos, sociales y culturales.

Libertades y garantías esenciales e inherentes de un ser humano

Estos derechos son universales, inalienables e intransferibles, lo que significa que nadie puede renunciar a ellos o transferirlos a otras personas.

Uno de los derechos humanos más básicos es el derecho a la vida. Este derecho garantiza que todos los seres humanos tienen el derecho a vivir y existir libre de la violencia y la amenaza de muerte. Además, todos tienen derecho a recibir atención médica adecuada y a vivir en un entorno seguro y saludable.

Otro derecho humano fundamental es la libertad de expresión. Este derecho permite a las personas expresarse libremente y sin temor a la represión, incluyendo el derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión. Además, la libertad de expresión incluye el derecho a acceder a la información y a recibir y difundir noticias y opiniones sin ser objeto de censura o restricción.

El derecho a la igualdad ante la ley es otro derecho humano importante. Este derecho garantiza que todos los seres humanos son tratados de manera justa e imparcial por el sistema legal, sin importar su raza, género, religión, origen étnico u otras características. Además, la igualdad ante la ley incluye el derecho a un juicio justo y a una defensa adecuada.

La libertad de asociación y de reunión pacífica también son derechos humanos cruciales. Estos derechos permiten a las personas reunirse pacíficamente y formar grupos para proteger y promover sus intereses y derechos. La libertad de asociación incluye el derecho a formar un sindicato y a participar en actividades políticas y sociales.

Otros derechos humanos son el derecho a la privacidad, el derecho a la educación, el derecho a la seguridad social, el derecho a un trabajo justo y equitativo, y el derecho a la propiedad. Todos estos derechos son esenciales para garantizar una vida digna y satisfactoria para todos los seres humanos.

Es pertinente destacar que, a pesar de la universalidad de los derechos humanos, todavía hay muchos desafíos para su protección y promoción en todo el mundo. En muchas partes del mundo, los derechos humanos son violados de diversas maneras, incluyendo la detención arbitraria, la tortura, la discriminación, la pobreza y la exclusión social. Además, muchos grupos vulnerables, como los refugiados, las personas en situación de desplazamiento forzado y las mujeres, a menudo enfrentan barreras adicionales para el acceso a los derechos humanos.

Los derechos humanos más violentados

Libertad de expresión: La libertad de expresión es un derecho fundamental que permite a las personas expresar sus opiniones y creencias sin temor a represalias. Sin embargo, en muchos países, esta libertad es limitada y se censura a aquellos que buscan expresar opiniones contrarias a las del gobierno.

Derecho a un juicio justo: El derecho a un juicio justo es un elemento clave del sistema de justicia, y garantiza que todas las personas tengan acceso a un juicio imparcial. Sin embargo, en muchos países, este derecho es violado, y las personas son detenidas y juzgadas de manera arbitraria.

Derecho a la no tortura: La tortura es una práctica inhumana y degradante que viola los derechos humanos y el derecho internacional humanitario. Desafortunadamente, la tortura sigue siendo una práctica común en muchos países.

Derecho a la privacidad: El derecho a la privacidad es un derecho fundamental que protege la vida privada y las comunicaciones de las personas. Sin embargo, en muchos países, este derecho es ignorado y las autoridades utilizan técnicas de vigilancia y espionaje para recopilar información sobre las personas.

Derecho a la libertad de religión y conciencia: El derecho a la libertad de religión y conciencia es un derecho fundamental que permite a las personas practicar y expresar sus creencias religiosas sin temor a represalias. Sin embargo, en muchos países, esta libertad es limitada y se persigue a las personas por sus creencias religiosas.

Antonio Nariño: un héroe de los derechos humanos

Antonio Nariño fue un líder político y social colombiano, conocido por su papel en la lucha por la independencia de Colombia y por sus contribuciones a la defensa de los derechos humanos. Nació en 1765 en Santafé de Bogotá y estudió en España antes de regresar a Colombia y participar en la lucha por la independencia del país.

Nariño es especialmente conocido por su papel en la defensa de los derechos humanos y la libertad de expresión. En 1792, tradujo al español la Declaración de Independencia de los Estados Unidos y la difundió en Colombia. Este acto marcó el comienzo de una campaña a favor de los derechos humanos en el país y sentó las bases para la lucha por la independencia.

Además, Nariño también fue un defensor de la libertad de expresión y la libertad de prensa. Durante su tiempo en la política, luchó contra la censura y el control gubernamental de la información. Estas luchas fueron cruciales para establecer la libertad de prensa como un derecho fundamental en Colombia.

En reconocimiento a su papel en la defensa de los derechos humanos, Nariño es considerado como un héroe nacional en Colombia. Su legado continúa inspirando a los defensores de los derechos humanos en todo el mundo y su contribución a la lucha por la libertad y la justicia sigue siendo una fuente de orgullo para la nación colombiana.

Usos y aplicaciones de Derechos Humanos

Los Derechos Humanos nos permiten ser reconocidos y de gozar de derechos básicos por nuestra sola condición humana.